viernes, 30 de marzo de 2012

Blanca Suárez: 'Miel de naranjas es una película muy especial'

A pesar de su juventud, Blanca Suárez (Madrid, 1988) es uno de los valores en alza del séptimo arte. Esta madrileña, que recibió el Roel a la actriz del siglo XXI en la Semana de Cine de Medina del Campo, se dio a conocer en la pequeña pantalla con la serie 'El Internado', y ahora debuta en la serie de Antena 3, El Barco
 
–¿Qué supone este premio?
–Todos los actores que nos hemos dado a conocer a través de la televisión siempre tenemos un poco de pánico porque no sabes si caerás bien al resto de soportes como son el corto, el cine, el teatro. Ver un panorama como este de Medina del Campo, en el que se valora sobretodo el mundo del cortometraje, te tienen en cuenta y valoran tu trabajo, hace pensar que gustas a más gente de la que tu crees.
 
–¿Cuáles son las cualidades que tiene que tener los actores del siglo XXI?
–No me siento capacitada para decirlo ya que no creo que sea nadie. Lo que a mí me ha funcionado es el trabajo, la disponibilidad y la ilusión por cada proyecto nuevo.
 
–¿Cuándo se estrena su próximo trabajo 'Miel de naranjas'?
–Está previsto para mayo y se presentará en la sección oficial del Festival de Málaga. Es una película muy especial porque pocas veces en el cine de España se ha tratado un tema de postguerra con tanta luminosidad. La película está ambientada y rodada en Andalucía y muestra un panorama y una sociedad con muchas flores, mucha luz, casa blancas, con gente riéndose y es extraño que una película ambientada en esa época muestre esta luminosidad, pero también muestra el momento amargo.
 
–¿Sintió presión al trabajar con Pedro Almodóvar?
–Sí, se siente presión porque se espera de tí que des el 120% en todas las ocasiones y todos hacemos lo que podemos en todos los trabajos. Unos días te sale mejor, otros estas más baja y sí que es verdad que haber trabajado con un director como Pedro Almodóvar presupone que lo harás bien si o si.
 
–Trabajó con Almodóvar y ahora con Imanol Uribe ¿Su carrera ha dado un salto sustancial?
–Puede ser. Si entendemos que dar un salto es trabajar con directores muy importantes a nivel nacional e internacional, si es así. Pero cada vez que te presentan un proyecto nuevo das un salto diferente.
 
–Usted pasó de la escuela de teatro Tritón a la pequeña pantalla y de la tele al cine. ¿Tiene ganas de hacer algo de teatro?
–Muchas ganas lo que pasa es que se necesita mucho tiempo para dedicarse de pleno a ello y trabajando, como es mi caso, de continuo en una serie es complicado. Lo que si que es verdad es que nunca encuentras el momento adecuado como para decir que tienes un parón y se da la casualidad de que tienes un proyecto maravilloso de teatro. No obstante en algún momento habrá que decir 'me pego la paliza, trabajo hasta media tarde y luego me marcho al teatro'. Y creo que eso llegará tarde o temprano.
 
–¿Tiene miedo a encasillarse en un rostro bonito?
–Hay ese riesgo. Pero hay que intentar demostrar que tu trabajo también merece la pena porque el rostro puede abrir muchas puertas y creo que negarlo no es sincero. En esta profesión hay que demostrar muchas cosas, Y demostrar que no solo eres un rostro bonito es el trabajo duro que viene después.
 

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